Según un estudio, los adictos al teléfono constituyen una amenaza mayor que los conductores ebrios
La conducción distraída ha superado a la conducción bajo los efectos del alcohol y el exceso de velocidad, convirtiéndose en la principal amenaza en las carreteras.
Los conductores están un 10% más distraídos al volante que el año pasado y el número de adictos a los teléfonos móviles se ha duplicado, según el tercer " Estudio de Conducción Distraída " anual de Zendrive que analizó más de 160 mil millones de millas de datos.
Uno de los hallazgos clave fue que los "adictos a los teléfonos" han reemplazado a los conductores ebrios como la principal amenaza vial en la actualidad, según los autores.
De acuerdo con el informe, un adicto al teléfono es alguien que usa el teléfono un 10% del tiempo, o más, mientras está conduciendo su vehículo. Los resultados mostraron que los adictos al teléfono pasan tres veces más tiempo de conducción usando sus teléfonos y un 28% de su tiempo de conducción ignorando activamente la carretera.
Además, los adictos al teléfono son los que más frecuentemente están en la carretera, 1,5 veces más que el resto de la población que conduce.
Para entender mejor los resultados del estudio, Zendrive realizó una encuesta a los conductores. Los resultados indican que aunque la gente sabe que la conducción distraída es un problema importante, no están lo suficientemente preocupados como para cambiar su comportamiento.
Alrededor del 85% de los encuestados reconocieron que la conducción distraída es un problema. Mientras que el 90% afirmaban ser conductores seguros, casi la mitad (47%) admitieron haber usado sus teléfonos un 10% o más de las veces durante la conducción, clasificándolos como adictos al teléfono.
Sin embargo, de los considerados adictos al teléfono, el 93% dijeron que son conductores "bastante seguros" o "extremadamente seguros".
Artículo originalmente publicado en:
Automotive Fleet